Entrevista a Barbaruti.

Año 2005 (o por ahí).


Barbaruti encuentra su mechero, verde como la hierba. Después de que se borrara una pedazo de entrevista nos toca hacer otra aunque no creo que supere la anterior, ya que en la otra íbamos peor.

-Bueno, Babaruti, ¿juras, peta en mano, que vas a ser totalmente sincera? O no. Vale. Sí, hombre, sí, por ser tú, por estar aquí tirada y porque sí.

-¿Me pasas un tiro? Pff, cao que sí.

-¿Qué es la vida? Tienes que empezar tan fuerte. (Se queda mirando un punto inexistente.) ¿Por dónde vas? (Se parte el culo y se lo sigue partiendo.) La vida no es más que caer, levantarse y volverse a caer. ¿Y si te haces pupita? Ja, ja. (Trocea un trozo de fantasmita que hay por el suelo.) Manteniendo en tu interior lo que creas que es tuyo, o sea, la razón para levantarte. (Me mira fijamente, se parte la polla, echa un trago al mini, me lo acerca.)

-Esta pregunta no puede faltar, ¿a qué aspiras? ¿Esa es la pregunta? Ja, ju, ji, ji. (Se echa para atrás, me tumbo al lado, se parte la polla.) Yo aspiro a vivir.

-¿Necesitas algo para ser feliz? Si lo supiera sería feliz, o no. (Nos partimos la polla sin saber muy bien por qué, muy bien solo.) Tuturuturú.

-¿Qué opinas de las compresas de noche? ¡Ja, ja, ja! ¿La verdad? No las uso mucho porque no me gustan, son un poco molestas (sigue con su explicación pero no pillo nada). Me ha entrado hipo, ay, seguro que estás cambiando mis palabras. Tos. Ay. Yo me siento hiposa, ja ja. (Se da la vuelta.) Oh! Me he clavado las llaves donde no debía y sigo con hipo, ajai, ajai, hip, ajai.

-¿Qué es lo que más te jodería perder en la vida? Pues nunca me lo había planteado. Pa eso estoy yo aquí. Pa tocar los cojones, hip, hip.

-¿Qué veneno te metes para estar así? Más chutes, no... Yo, hip, yo de veneno, nada. Si acaso sustancias naturales modificadas por los moros.

-¿Qué es la melancolía? ¿Eh? Pos búscalo en el diccionario. Añorar tiempos pasados. ¿Y entonces qué es la nostalgia? Echar de menos el pasado.

-¿Si te dijera "llévame al lugar donde has sido feliz" dónde me llevarías? ¿Solo uno? Los que quieras. Te... te llevaría a mis sueños. ¿Muy lejos queda eso? Pregunto. Lejos, no, paralelo.

-¿Alguna vez te guardaste un "lo siento"? Seguro. Y si concretas qué tal. Un lo siento... Ay, es que me voy a poner así, otra vez la llevas. De situaciones concretas no me acuerdo pero que seguro.

-¿Es lo mismo escribir sabiendo que lo van a leer? Pues no, a no ser que no te importe nada y tengas mucha confianza en ti. O sea que no.

-¿Darías la vida por algo? (Fuma, se lo piensa.) Por mis ideales pero no sé si tendría valor. ¿Te consideras cobarde? Seeh, bastante.

-¿Existen los pobres? (Se ríe, piensa) ¿Eso es la pregunta? Todavía lo estoy escribiendo. Sí, pero los hay de corazón y de bienes.

-¿Podrías ser feliz sin desear nada? (Mira al horizonte) Nunca lo sabré.

-¿Por qué cosas te acojonas? Las arañas me dan un miedo... (Se acuesta y no se clava las llaves esta vez.) Y la gente. ¿Qué clase de miedo te da la gente? (Se queda to pensativa) Me siento inferior, me cuesta hablar. (Se queda un rato pensando. Los árboles suenan a lo lejos, a lo lejos... "Ya verás cuando leas esto", le digo.)

-¿Cuál es la soledad más puta? ¿Qué tipos de soledad hay? Pues hay soledades con gente las hay sin ella, y las eternas, o no. O no (se quita una legaña, parece que es un tramite que tiene que pasar todo el mundo que responde mis preguntas). La eterna aunque nada es para siempre.

-Decían tus ojos tristes... Ejem. ¿Te ves dentro de unos años? Pues no.

-Cuéntame algo. Pues no.

-¿Cuál es tu lema en la vida? No tengo ninguno, soy así de triste.

-¿Sueñas mucho? Lo hacía pero cada vez intento soñar menos. A ver lo que sale de ahí, chaval. Ja, ja, ja. (Coge el mini) Apunta: Glub, glub, glub. Ja, ja.

-¿Qué es lo que te dececpiona? Su hipocresía. ¿Crees que todo el mundo la tiene? Sí, creo que la única diferencia es si luchas contra ella o no.

-¿Un fiti? Vale. ¿Por qué fumas? Porque soy un poco suicida, entonces, a ver si así lentamente... Por ver si te mata, como el Ramón Sampedro.

-¿Qué opinas de la muerte? (Musita como para sí "de la muerte..." unas 5 veces, mientras una hormiguita recorretea esta hoja. Joder, no veas si piensa... Reflexiona. "nosequé" en mano, no entiendo mi letra.) Joder, cacho de pregunta, nunca me la habían hecho. Yo opino que... no, si era por decir algo, me voy a quedar ahí otra vez parada (y así fue). Opino, que aunque creas que es una especie de liberación... No, no, no es que tenía otra parte, voy a ver si dejo de fumar porros... Siempre te costará alcanzarla.

-¿Qué hacemos aquí? Aprender.

-¿Te gustan las promesas? (Mastica y mira al cielo.) Prefiero no necesitar hacerlas. Ya, pero en el sentido de comprometerte con alguien. Es que no hace falta una promesa para cumplirlo. Hazme una promesa. ¿Es necesario? Pues no, pero hazla. (Jode el rotulador pintando en el suelo en el que estamos postradas.) Prometo seguir buscándome.

-Vale, vale, fale. ¿Pos qué tal te va? Pues bien, la verdad es que me va bastante bien, aunque me emperre en que no.

-¿Quién eres? Digo yo que si ya es hora de que me conozcas. Soy Bárbara, no hay más. ¿Qué me dices con Bárbara? Qué todavía no sé quién soy, eso es lo que me empeño en buscar o en saber. Un grano de arena más.



"We want to rebel our selves and speak our minds an be intuitibe." Eso lo escribió en la hoja.

Después de mis súplicas y lloros consigo que cambiemos los papeles, más bien que se quede ella con todos y no tenga yo que escribir). Eso será en la próxima edición...